Un EMP (pulso electromagnético) puede potencialmente destruir todo lo que utiliza electricidad, pero el alcance del daño depende de varios factores como la intensidad del EMP, la distancia desde la fuente y la vulnerabilidad inherente del dispositivo. Las bombillas, especialmente aquellas con componentes electrónicos como las bombillas LED, podrían resultar dañadas por un EMP debido al aumento de voltaje y corriente inducido por el pulso. Las bombillas incandescentes tradicionales, que tienen componentes eléctricos más simples, pueden ser menos susceptibles, pero aún así podrían verse afectadas por las sobretensiones asociadas.
Que un EMP destruya una bombilla depende del tipo de bombilla y de la intensidad del EMP. Las bombillas LED y CFL (lámpara fluorescente compacta) contienen circuitos electrónicos que pueden dañarse por los picos de alto voltaje y corriente inducidos por un EMP. Las bombillas incandescentes tradicionales, que dependen de un filamento simple, tienen menos probabilidades de sufrir daños directos por el propio EMP, pero podrían verse afectadas por sobretensiones causadas por el impacto del EMP en la red eléctrica.
Un EMP no necesariamente destruye todos los componentes electrónicos, pero puede causar daños importantes a muchos tipos de dispositivos electrónicos, en particular aquellos con microelectrónica y circuitos integrados. La vulnerabilidad de un dispositivo electrónico a un EMP depende de su construcción, el nivel de blindaje que tiene y su proximidad a la fuente de EMP. Los dispositivos con muchos componentes electrónicos, como computadoras, teléfonos inteligentes y vehículos modernos, tienen más probabilidades de sufrir daños a causa de un EMP.
Un EMP puede afectar cosas que están apagadas, pero el grado de impacto varía. Incluso cuando están apagados, muchos dispositivos electrónicos permanecen conectados a fuentes de energía o tienen componentes sensibles que pueden resultar dañados por los campos electromagnéticos inducidos. Los dispositivos que están completamente desconectados de cualquier fuente de energía y no tienen una carga interna significativa almacenada tienen menos probabilidades de verse afectados, pero no son completamente inmunes. El cableado y los componentes dentro del dispositivo aún pueden actuar como antenas, captando el pulso y potencialmente causando daños.
Un EMP puede afectar las luces, especialmente los sistemas de iluminación modernos que incorporan componentes electrónicos. Las luces LED, las luces fluorescentes con balastos electrónicos y los sistemas de iluminación inteligentes son particularmente susceptibles a sufrir daños por un EMP debido a su dependencia de circuitos electrónicos. Las luces incandescentes tradicionales podrían verse menos afectadas directamente por el EMP, pero aún podrían sufrir daños por sobretensiones en la red eléctrica causadas por el EMP. El impacto general en los sistemas de iluminación dependerá del tipo de luces, la intensidad del EMP y la proximidad a la fuente de EMP.