Los LED (diodos emisores de luz) son dispositivos semiconductores que emiten luz cuando la corriente fluye a través de ellos en dirección directa. Cuando se conectan correctamente en un circuito con el ánodo (+) conectado al voltaje positivo y el cátodo (-) al voltaje negativo (suponiendo que sea un circuito de CC), los LED se iluminan cuando los electrones se recombinan con los huecos de electrones dentro del material semiconductor, emitiendo fotones. de luz. Sin embargo, si los LED se conectan con polaridad inversa, es decir, se intercambian el ánodo y el cátodo, normalmente no conducen corriente y no emiten luz.
Operar un LED en polarización inversa, donde la polaridad se invierte en comparación con su operación directa prevista, da como resultado un flujo de corriente mínimo o nulo a través del LED. Los LED están diseñados con una unión incorporada que solo permite que la corriente fluya en una dirección (polarización directa), lo que facilita la emisión de luz. En polarización inversa, esta unión bloquea el flujo de corriente, evitando que el LED se encienda. Además, aplicar voltaje inverso más allá de la clasificación máxima de voltaje inverso del LED puede dañar el LED de forma permanente, provocando fallas o una reducción del rendimiento con el tiempo.
Cuando los LED están cableados incorrectamente, como al conectar el ánodo al lado negativo y el cátodo al lado positivo de una fuente de alimentación de CC, no se iluminan debido a la ausencia de flujo de corriente a través del LED en dirección directa. Este escenario de cableado incorrecto generalmente resulta en que el LED no emita luz visible. En algunos casos, si el voltaje inverso aplicado excede la clasificación máxima de voltaje inverso del LED, puede causar daños irreversibles al LED al romper su unión interna o dañar los materiales semiconductores, lo que inutiliza el LED.
Por lo tanto, para garantizar el funcionamiento adecuado y la longevidad de los LED, es fundamental observar la polaridad correcta al conectarlos en los circuitos. Los LED están diseñados para tensiones directas y clasificaciones de corriente específicas, y el cumplimiento de estas especificaciones garantiza un rendimiento y una confiabilidad óptimos en diversas aplicaciones electrónicas y de iluminación.