Una regleta y un protector contra sobretensiones cumplen diferentes funciones a la hora de gestionar dispositivos eléctricos y protegerlos de posibles peligros. Una regleta es esencialmente un cable de extensión de múltiples tomas que permite conectar varios dispositivos a una sola fuente de alimentación. Proporciona salidas adicionales más allá de las que ofrece un enchufe de pared típico, lo que lo hace conveniente para conectar múltiples dispositivos simultáneamente. Sin embargo, una regleta por sí sola no ofrece ninguna protección contra sobretensiones o picos de voltaje.
Por otro lado, un protector contra sobretensiones, también conocido como supresor de sobretensiones o descargador de sobretensiones, incluye circuitos diseñados para proteger los dispositivos conectados de picos o sobretensiones de voltaje. Estas sobretensiones pueden ocurrir debido a la caída de rayos, fluctuaciones de la red eléctrica o al encendido/apagado de dispositivos eléctricos de alta potencia. Los protectores contra sobretensiones están equipados con varistores de óxido metálico (MOV) u otros componentes que desvían el exceso de voltaje lejos de los componentes electrónicos sensibles, evitando así daños o degradación de los equipos conectados a ellos.
Al comparar una regleta con un protector contra sobretensiones, la elección depende del nivel de protección necesario para sus dispositivos. Si necesita principalmente tomas de corriente adicionales y no requiere protección contra sobretensiones, una regleta puede ser suficiente. Sin embargo, si su equipo electrónico es sensible a las fluctuaciones de voltaje o si vive en un área propensa a tormentas eléctricas, es recomendable invertir en un protector contra sobretensiones para proteger sus dispositivos contra posibles daños causados por sobretensiones.
Para identificar si una regleta incluye protección contra sobretensiones, consulte la etiqueta o el embalaje del producto. Los protectores contra sobretensiones generalmente indican su capacidad para suprimir sobretensiones o picos de voltaje. Busque términos como «protector contra sobretensiones», «supresor de sobretensiones» o «tomacorrientes protegidos» en el propio dispositivo o en la descripción del producto. Además, los protectores contra sobretensiones suelen venir con una clasificación en julios, que indica su capacidad para absorber energía de las sobretensiones. Esta información puede ayudar a distinguir entre una regleta básica y un protector contra sobretensiones.
Generalmente no se recomienda enchufar un protector contra sobretensiones a otra regleta. Hacerlo puede sobrecargar potencialmente el circuito, especialmente si hay varios dispositivos de alta potencia conectados tanto al protector contra sobretensiones como a la regleta. Este escenario aumenta el riesgo de sobrecalentamiento o de provocar un incendio debido al consumo excesivo de corriente a través de los tomacorrientes. En su lugar, es recomendable enchufar el protector contra sobretensiones directamente a un tomacorriente de pared para garantizar que funcione de manera adecuada y segura para proteger los dispositivos conectados de picos de voltaje.
Si bien los protectores contra sobretensiones ofrecen una valiosa protección contra sobretensiones eléctricas, tienen algunas desventajas a considerar. En primer lugar, los protectores contra sobretensiones tienen una vida útil y una eficacia limitadas. Con el tiempo, la exposición repetida a sobretensiones puede degradar los componentes internos del protector contra sobretensiones, reduciendo su capacidad para brindar una protección adecuada. Es necesario un mantenimiento regular y el reemplazo ocasional de los protectores contra sobretensiones para garantizar una eficacia continua. Además, es posible que los protectores contra sobretensiones no brinden una protección completa contra todo tipo de perturbaciones eléctricas, como rayos directos o cortes de energía prolongados. Es importante utilizar protectores contra sobretensiones junto con otras medidas de protección y cumplir con las pautas del fabricante para maximizar su vida útil y efectividad en la protección de equipos electrónicos.