En un generador, el excitador cumple la función crucial de proporcionar el campo electromagnético inicial necesario para la generación de energía eléctrica. En concreto, suministra corriente continua (CC) a los devanados del rotor del generador, creando un campo magnético. Este campo magnético induce voltaje en los devanados del estator a medida que gira el rotor, generando así energía eléctrica.
Básicamente, el excitador pone en marcha la capacidad del generador para producir electricidad estableciendo el campo magnético necesario en el rotor.
Un generador requiere un excitador porque funciona según el principio de inducción electromagnética, donde la energía eléctrica se genera mediante el movimiento relativo entre los campos magnéticos en los devanados del rotor y del estator. Sin un excitador para establecer el campo magnético inicial en el rotor, el generador no podría inducir voltaje en los devanados del estator y producir electricidad.
Por lo tanto, el excitador es esencial para iniciar y mantener el proceso de generación de energía del generador.
La excitación en un generador juega un papel fundamental en el control del voltaje de salida y la estabilidad de la energía eléctrica generada.
El excitador suministra corriente continua a los devanados del rotor del generador, lo que determina la intensidad del campo magnético y, en consecuencia, la tensión de salida del generador. Al ajustar el nivel de excitación, ya sea manual o automáticamente a través de reguladores de voltaje, los operadores pueden controlar y estabilizar el voltaje de salida del generador, asegurando que cumpla con las especificaciones requeridas para las cargas conectadas y la sincronización de la red.
Un excitador normalmente obtiene su energía de la salida del propio generador.
Una pequeña porción de la energía eléctrica generada por el generador principal se desvía al excitador, donde se rectifica para producir CC. Esta CC se utiliza luego para energizar los devanados del rotor del generador, creando el campo magnético necesario para la generación de energía.
Este proceso autosostenible permite que el generador mantenga su excitación y continúe generando electricidad mientras sea accionado mecánicamente.
Un cable excitador en un generador se refiere a la conexión eléctrica que suministra la corriente continua desde el excitador a los devanados del rotor.
Garantiza que el voltaje de CC producido por el excitador llegue a los devanados del rotor de manera constante y confiable, lo que permite que el generador mantenga el campo magnético requerido para la generación eléctrica. El cable excitador es un componente crítico en el sistema de excitación, ya que garantiza el funcionamiento y control adecuados del voltaje de salida del generador.
Los excitadores se utilizan en generadores síncronos para garantizar que el generador mantenga un funcionamiento sincrónico con la red eléctrica u otros generadores en un sistema de energía.
Los generadores síncronos deben operar a una velocidad específica (velocidad sincronizada) para mantener la frecuencia y la alineación de fase adecuadas con la red.
El excitador proporciona la corriente CC necesaria a los devanados del rotor del generador, lo que le permite generar energía eléctrica sincronizada con la frecuencia y fase de la red, lo que garantiza un suministro de energía estable y confiable.
El voltaje del excitador de un generador se refiere a la magnitud del voltaje de CC suministrado a los devanados del rotor por el excitador.
Este voltaje determina la fuerza del campo magnético en el rotor del generador, lo que influye directamente en el voltaje de salida y la estabilidad de la energía eléctrica generada. El voltaje del excitador se regula y ajusta cuidadosamente para mantener el voltaje de salida deseado del generador, lo que garantiza un rendimiento constante y compatibilidad con las cargas y sistemas eléctricos conectados.