La principal diferencia entre un LDR (resistencia dependiente de la luz), un fotorresistor y un fotodiodo radica en sus principios operativos y características de respuesta. Un LDR o fotorresistor cambia su resistencia según la intensidad de la luz; niveles de luz más altos dan como resultado una menor resistencia. Por el contrario, un fotodiodo genera una fotocorriente proporcional a la intensidad de la luz cuando se expone a la luz, especialmente en polarización inversa. Los fotodiodos tienen tiempos de respuesta más rápidos y son más sensibles que los LDR, lo que los hace adecuados para aplicaciones de medición y detección de luz precisas, mientras que los LDR se usan típicamente en aplicaciones más simples, como interruptores sensibles a la luz.
La diferencia entre un LDR y un fotodiodo radica principalmente en su funcionalidad y tiempo de respuesta. Un LDR cambia su resistencia según la cantidad de luz que recibe, lo que puede medirse como un cambio de voltaje o corriente a través de un circuito. Los LDR tienen un tiempo de respuesta más lento y normalmente se utilizan en aplicaciones donde el nivel de luz cambia gradualmente. Un fotodiodo, por otro lado, genera una corriente cuando se expone a la luz, siendo la corriente directamente proporcional a la intensidad de la luz. Los fotodiodos tienen tiempos de respuesta mucho más rápidos y se utilizan en aplicaciones que requieren una detección de luz rápida y precisa, como comunicaciones ópticas e instrumentos científicos.
Un LDR, o fotorresistor, se diferencia de una resistencia en que su resistencia varía con la exposición a la luz, mientras que una resistencia tiene un valor de resistencia fijo independientemente de la luz. La resistencia de un LDR disminuye a medida que aumenta la intensidad de la luz, lo que lo hace útil para aplicaciones de detección de luz. Una resistencia estándar, por otro lado, mantiene una resistencia constante y se utiliza para controlar el flujo de corriente, dividir voltajes y establecer puntos de polarización en circuitos electrónicos, sin verse afectados por las condiciones de luz.
Un fotorresistor, o LDR, y un fotodiodo son dispositivos sensibles a la luz pero funcionan de manera diferente. Un fotorresistor cambia su resistencia eléctrica según la cantidad de luz que recibe, lo que lo hace adecuado para aplicaciones como sensores de luz y controles automáticos de iluminación. Un fotodiodo genera una fotocorriente cuando se expone a la luz, particularmente bajo polarización inversa, y se utiliza en aplicaciones que requieren una medición de luz rápida y precisa, como en sistemas de detección y comunicación óptica. Los fotodiodos generalmente ofrecen tiempos de respuesta más rápidos y mayor sensibilidad en comparación con los fotorresistores.
La diferencia entre un LDR y un fototransistor radica en su estructura y funcionalidad. Un LDR cambia su resistencia en función de la intensidad de la luz y se utiliza principalmente en aplicaciones simples de detección de luz. Un fototransistor, similar a un fotodiodo, es un dispositivo semiconductor que actúa como un transistor con su corriente de base controlada por luz en lugar de una señal eléctrica. Los fototransistores proporcionan mayor sensibilidad y tiempos de respuesta más rápidos en comparación con los LDR y se utilizan en aplicaciones que requieren una detección de luz rápida y precisa, como en optoelectrónica y aislamiento de señales.